10 malos hábitos que están afectando tu forma de cantar

Protege tu voz. ¡Evita estos 10 malos hábitos vocales!

Seamos realistas: cantar requiere dedicación.

Da igual lo aplicado que seas, mantener una buena rutina de práctica día tras día exige esfuerzo.

Lo difícil es hacerlo todos los días. Y a lo largo de tu trayectoria como cantante, es normal que se te peguen algunos malos hábitos.

Hoy hablaremos de 10 malos hábitos en los que he visto caer a cantantes a lo largo de mis más de 10 años enseñando a más de 1.000 alumnos.

Algunos son físicos, otros son mentales y psicológicos. Pero todos pueden causar graves daños a tu voz si no se controlan.

  1. Subir para buscar la afinación correcta

Cuando aprenden como cantar, muchos cantantes quieren subir con su voz a buscar las notas más altas. ¡Como si la nota aguda fuera una caja de cereales encima de la nevera y se pusieran de puntillas para cogerla!

Esto tiene sentido. Es difícil llegar a las notas agudas, y los cantantes sienten que deben “hacer algo” para impulsar su voz hasta ellas. Pueden elevar los hombros, o subir las cejas o presionar su laringe (o su caja de voz).

Pero eso NO ayuda a llegar a las notas agudas. Eso es porque las notas agudas se crean tensando las cuerdas vocales en la garganta. Este estiramiento acelera la vibración de las cuerdas produciendo una nota más alta.

high notes

Eso es todo. Un estiramiento. No hay que subir ni bajar, ni darle más vueltas.

Cómo solucionarlo

La próxima vez que intentes cantar notas agudas, ¡no subas a buscarlas! Las cuerdas vocales no se mueven ni arriba ni abajo, no necesitas subir los hombros ni nada parecido.

En vez de eso, imagina que estás por encima de la nota. En vez de presionar hacia arriba y apretar tu voz, acércate a la nota desde arriba y baja a por ella.

  1. Cantar fuera de tu rango vocal

Hay seis tipos principales de voz que usamos en la enseñanza actual. ¡Tu sabes cuales son! De grave a agudo, son:

  1. Bajo
  2. Barítono
  3. Tenor
  4. Alto
  5. Mezzo
  6. Soprano

Cada voz tiene su rango de notas y descubrir el tuyo es un paso esencial en tu trayectoria como cantante.

Pero, lo creas o no, muchos cantantes no han explorado la totalidad de su rango vocal. Los cantantes estiran y aprietan su voz para llegar a notas agudas o graves en lugar de expandir su tesitura de forma correcta. Ahora hablaremos de ello…

Cómo solucionarlo

Toma tu nota más alta, y baja una quinta. Si tu nota más aguda es Sol5, restar una quinta te llevará a Do5.

De igual forma, busca tu nota más grave y sube una cuarta o una quinta desde la misma. Si tu nota más grave es Sol2, empieza en Do3.

El rango que obtenemos, de Do3 a Do5, es una tesitura fantástica de dos octavas, genial para un tenor. ¿Necesitas ayuda encontrando tu tesitura? ¡Usa mi app gratuita Rangefinder para encontrarla en solo seis segundos!

  1. Subir tu laringe

Hasta ahora hemos visto dos malos hábitos que causan tensión vocal. ¿Pero qué es lo que físicamente causa tensión?

Bueno, una cosa IMPORTANTE es subir la laringe.

La laringe es el órgano hueco en tu garganta que alberga tus cuerdas vocales.

Los cantantes muchas veces suben la laringe para llegar a las notas agudas. La presionan y así comprimen sus cuerdas vocales produciendo un sonido nasal y apretado.

Cómo solucionarlo

Bosteza

¡En serio! Una laringe alta es la postura que tu garganta adopta al tragar. Para bajar tu laringe has lo contrario: bostezar.

Intenta cantar una frase sencilla en medio de un bostezo y sentirás cómo desaparece esa tensión vocal.

  1. Canto nasal

Como ya he dicho, elevar la laringe resulta en un sonido apretado y nasal.

¡Pero esa calidad nasal puede aparecer en tu forma de cantar incluso si tu laringe está relajada!

El sonido nasal ocurre cuando el velo del paladar (el tejido en la parte trasera de la garganta, junto al techo de la boca) cae y el tono de la voz es forzado sobre el velo del paladar y hacia la cavidad nasal.

Cómo solucionarlo

Con tu pulgar y tu índice pellizca suave e intermitentemente la parte superior de tu nariz mientras cantas.

Cuanta más vibración en tu nariz, más nasal tu voz. Si tu voz es demasiado nasal, pellizcar tu nariz hará que el tono cambie ligeramente.

Ajusta tu tono e intenta cantar a través de tu boca en vez de tu nariz, y reduce la vibración nasal. Si cantas correctamente a través de tu cavidad bucal, no deberías notar diferencia alguna al pellizcar tu nariz.

  1. Tensión de la lengua

Casi toda la articulación del sonido vocal viene de la lengua.

Sin embargo, muchos cantantes hacen cosas raras con su lengua, especialmente subir su lengua hasta el techo de la boca en las notas más altas. Esto produce mucha tensión en la lengua.

Cómo solucionarlo

Comprueba la tensión de tu lengua palpando tu músculo digástrico. Es el músculo debajo y detrás de la barbilla, en torno a la parte delantera superior de tu cuello.

Pon la punta de tu pulgar bajo tu barbilla y deslízalo hacia atrás hasta notar ese músculo móvil y suave directamente bajo tu lengua. Luego traga. Si estás en el sitio correcto notarás la presión del músculo en tu pulgar.

Finalmente, cuando cantes, querrás que este músculo esté totalmente relajado. No conviene tener nada de rigidez en el digástrico, como la que aparece cuando tragas.

Haz la prueba con tu pulgar y busca momentos en tu canto en que el músculo se endurece. Trata de relajar tu lengua e intenta mantener tu músculo digástrico blando y esponjoso.

  1. Extender las vocales

Los sonidos de las vocales se crean abriendo y cerrando el tracto vocal. Normalmente es un tipo especial de forma de la lengua.

Muchos cantantes quieren extender las vocales, lo que significa que aprietan su boca de manera que no lo harían si simplemente usaran su voz para hablar.

El resultado es un tono vocal plano, comprimido y con sonido extraño.

Cómo solucionarlo

¡Canta como si hablaras!

¡En serio! Canta las vocales como las hablarías normalmente, con el tono ajustado al de la música. No aprietes ni expandas ninguna vocal.

Si esto te da problemas, prueba lo que yo llamo la “técnica Solo en Casa”.

Presiona con tus manos a ambos lados de tu boca y canta unas pocas frases sencillas. Siente los límites de tu boca e intenta que no sobrepasen tus dedos.

  1. Cantar demasiado suave

Muchos cantantes (especialmente aquellos con una tesitura más alta) cantan demasiado suavemente en la parte grave de su voz. El resultado es mucha tensión en las notas altas.

¿Por qué pasa eso?

Bien, normalmente, si en la zona más grave cantas sin apoyo, tendrás que añadir tensión cuando subas a las notas altas.

Básicamente, en vez de cantar de forma más llena en la voz de pecho, estás usando demasiada resonancia de cabeza.

La voz de cabeza es la versión más ligera y aérea del canto, generalmente en la parte superior de la tesitura. Pero cuando cantas, es crucial que la voz permanezca plena y fuerte todo el tiempo, sin importar en la parte de tu rango vocal que estés.

Cómo solucionarlo

¡Practica la voz de pecho!

Pon tu mano en tu pecho y di la frase que intentas cantar.

Si usas adecuadamente la voz de pecho, notarás una vibración en tu mano, incluso en las notas altas de la canción. Si notas muy poca vibración, el equilibrio entre voz de cabeza y de pecho se ha perdido.

  1. Pasar al falsetto

Muchos cantantes tienen un salto de voz y pasan a falsete cuando hacen la transición a la parte más aguda de su voz.

Idealmente, te conviene mantener tu sonido continuo desde la parte más grave a la aguda y viceversa. Los saltos deberían ser apenas perceptibles y el falsete no debería ser necesario en la mayoría de las zonas altas.

Cómo solucionarlo

Un buen ejercicio para suavizar nuestros cambios de voz es lo que llamo el “no del mocoso”.

Canta una escala y media en cualquier tono en que te sientas cómodo, digamos en Do:

En cada nota, di “no” como si fueras un niño pequeño.

El sonido “no” entrena tus cuerdas vocales a abrirse y cerrarse rápidamente al cambiar de voz de pecho a voz de cabeza. Esta es la clave para liberar tu voz mixta.

  1. Demasiado vibrato

El vibrato es el temblor o vibración del tono de canto.

Puede ser natural o artificial.

Pero un vibrato excesivo, demasiado amplio y trémulo, es un signo que revela a un cantante mal preparado.

Es como echarle demasiada sal a la comida. Un vibrato excesivo podría sonar bien, ¡pero puede estropearlo todo!

 Cómo solucionarlo

NO añadas vibrato a cada nota. Intenta usar el vibrato SOLO en estas situaciones:

  1. Palabras que se sostienen, las que aguantas un poco más que otras en una canción.
  2. Palabras con significado, palabras clave que quieres que destaquen y llamen la atención del oyente.

Idealmente, solo usarás el vibrato en notas que son ambas cosas.

La última palabra o sílaba de una frase a menudo se alarga; este puede ser un sitio ideal para un elegante vibrato.

  1. Practicar demasiado una canción

Muchos cantantes practican su canción favorita una y otra vez. Es comprensible: todos tenemos alguna canción que nos gusta más que las otras.

Pero ese es el asunto. Cuando un cantante practica demasiado una canción, también practica los malos hábitos asociados a la misma. Van profundizando en el mismo agujero.

Cómo solucionarlo

Grábate cantando y revisa la grabación para identificar áreas problemáticas concretas en la canción. Usa los ejercicios vocales para identificar problemas y mejorar esas áreas.

¡Que no te preocupe ignorar la letra! Supongamos que haces un cambio a falsetto. Usa el ejercicio del “no” para suavizar ese momento concreto de la canción.

Una vez lo hayas resuelto, vuelve a la canción y canta la letra.


Conclusión

Tanto si eres un cantante veterano como si estás empezando, espero que este artículo te ayude a superar los obstáculos que puedas tener que afrontar y a hacer crecer tu confianza como cantante…

Te aseguro que, si dedicas el tiempo y el esfuerzo a acabar con estos malos hábitos, eso te dará resultados en tu carrera como cantante.

Dale una mirada a mi curso Master Your Voice para más consejos y trucos para cantar sin tensiones.