Cómo hacer que tu carrera musical dé beneficios: 10 reglas de negocios para artistas DIY

Sé inteligente y trata un ARTE como una pequeña empresa

La mayoría de la gente escucha términos como “la industria del cine” o “la industria de la música” y solo se fija en la segunda parte. Para tener éxito en los negocios, en cualquier negocio, tienes que ser un hábil negociante. Si quieres ganarte la vida como artista, tienes que ser tan listo como cualquier hombre de negocios en una reunión, o al menos lo suficientemente listo para haber contratado a la persona más hábil de la sala.

Si hubieras iniciado cualquier otro tipo de negocio sin un contable o un abogado para orientarte, te mirarían como a un inconsciente; sin embargo, en el mundo del arte, te miran así si empiezas con ellos. Esto es una gran incongruencia, y deberías enfocar tu carrera artística desde un punto de vista más lógico. Muchos grandes artistas lo perdieron todo en malas decisiones empresariales. La mayoría de artistas de éxito cosechan sus mayores éxitos después de entender la parte de negocio de su arte, y de ponerlo todo en orden antes de la siguiente oportunidad. Desafortunadamente, la mayoría de artistas “indie” o principiantes intenta progresar solo con su arte, y la parte de negocio puede ser dura, haciéndolos sentir exhaustos.

Empezando yo mismo como un artista indie. trabajé duro, tuve algo de suerte y mis logros me llevaron a ser consejero de muchos artistas y compañías de éxito. Mientras me dedicaba a eso, me encontré con un montón de problemas repetitivos. Aquí tienes diez consejos para ayudarte a gestionar adecuadamente tu negocio. Síguelos con la misma pasión que pones en tu arte, y saldrás adelante.

1. Empieza con una declaración de principios y un plan de negocio

Un proyecto apasionado será contagioso para todo el que sea sensible a esa pasión, pero, en algún momento, si quieres ganarte la vida con tu arte, deberás trabajarlo como un negocio. Empieza por escribir una misión o declaración de principios que te recuerde la pasión que quieres compartir, y ayude a los demás a alinearse con tu causa. Tener un plan de negocio a punto también te ayudará a centrarte en las operaciones del día a día y lo que necesitas hacer para ganar dinero viviendo esa pasión y alimentándola.

2. Analiza qué hará falta para ser rentable

Sé capaz de calcular tus gastos, de saber cuánto has de vender para cubrir tus costes, y asegúrate que tu margen de beneficio es normal.

Muchos artistas se guían por el precio medio para vender un producto, mientras otros son poco realistas con el valor del producto. Otros, especialmente los músicos y cómicos que pasan mucho tiempo en la carretera, empiezan a recoger lo que pueden conseguir por una venta de múltiples productos después de un show. Aquí es donde conocer los límites de tu plan de negocio, que ha sido fruto de un buen trabajo de observación, te ayudará a vivir bajo las condiciones normales de un negocio, y, por tanto, ser capaz de que tu arte sea tu modo de vida.

Toma el siguiente ejemplo de un músico indie. Vender un CD después de un show por $10 es normal, mientras que pedir $30 hace menos probables las ventas en el punto de venta mientras la gente sale de la sala. Conseguir un buen acuerdo con el estudio de grabación, o producir tu música en casa te permitirá mantener los costes bajos, traspasando así el ahorro. Si alguien tiene cara de “Hagamos un trato”, entonces sé un buen vendedor: “Veo que eres un auténtico fan y quieres compartir mi música, y me gustaría ayudarte, así que puedo darte una tarjeta de descarga digital por $5 e incluso te la dedicaré!” La última vez que pedimos tarjetas de descarga conseguimos un muy buen trato, con lo que ampliamos nuestras posibilidades de conseguir beneficios en los conciertos. Puedes satisfacer a tus fans y cumplir tus objetivos económicos; simplemente tienes que ser espabilado.

Tampoco debes olvidar hacer tus hojas de gastos, tienen que ser para todo, no solo tus costes de negocio, sino para tu vida. Si este va a ser tu trabajo, necesitas que te pague también la vida. Ten en cuenta tus gastos del día a día y los ahorros, así sabrás cuánto te costará que tu negocio de beneficio. La mayoría de artistas indie calculan lo que costará hacer su negocio funcionar (o simplemente ganarse la vida como artistas), pero en una situación normal de trabajo, tú miras tu cheque. Considérate a ti mismo un empleado de tu propio negocio. ¿Ganas lo suficiente para pagar tus facturas, ahorrar dinero e irte de vacaciones? Que tu compañía obtenga beneficios no significa que te financie: si necesitas vivir de tu arte, asegúrate de que tu salario y tu nivel de vida están incluidos en el plan de negocio. Como mi propio CEO, soy culpable de pagarme muy poco. Si estuviera trabajando para otro y me pagasen tan poco, lo dejaría. Ponte en situación de amar tu negocio, y págate un salario correcto de forma que no quieras dejarlo.

3. Autofinánciate si puedes

Con las modernas tecnologías, la mayoría de artistas puede empezar con pocos gastos. Muchos poseen el equipo básico para su actividad artística. Mi esposa produjo un álbum en el salón de casa que llegó a optar a la lista de los Grammy; con el equipo adecuado y un ordenador decente, el arte es mucho más accesible para el mercado indie.

Pedir un préstamo es una manera normal de iniciar un negocio, pero devolver créditos con intereses puede ahogar un pequeño negocio, y es una de las razones principales por las que los pequeños negocios fracasan. Prepárate para el éxito y al mismo tiempo controla tu destino sin inversores intentando impulsar tu arte.

Si necesitas más dinero para horas de estudio o para una película, hazlo como un buen hombre de negocios. Consigue muchos presupuestos, de diferentes partes. Hay muchas clases de inversores y opciones bancarias a tu alcance. Yo sugeriría pedir consejo a un inversor. Ellos pueden orientarte en la dirección correcta. Otros artistas que en el pasado hayan tenido que pedir préstamos también pueden aconsejarte. Si tienes dudas, pregunta a alguien que conozcas y en quien confíes; hay mucha gente dispuesta a ofrecer consejos. Una vez pedí ayuda con mi plan de negocio a un estudiante de MBA; él tenía que hacer un plan de negocio como trabajo de clase, así que era una tarea que tenía que hacer de todas formas, y los dos nos beneficiamos de ello. La Small Business Administration es un recurso gratuito en el que empresarios retirados son financiados por el gobierno para dar consejo a pequeñas empresas a coste cero, y están en todas las grandes ciudades.

4. Limita tu riesgo

Un nuevo negocio es un riesgo, como lo es cada nueva aventura. Trata tu nuevo álbum, película o exposición artística como una nueva expansión de tu negocio. Nunca crezcas más allá de tus medios y tu modelo de éxito. Si lo haces bien, no inviertas todo tu tiempo y dinero en algo que haya supuesto un crecimiento mínimo o lento en el pasado. Una situación que he visto con demasiada frecuencia es la siguiente: un músico tiene algo de éxito en un tour y con las ventas de su CD independiente, entonces entra en el estudio e invierte todo su dinero en una producción de calidad, y sus fans dicen que ha perdido frescura y suena “sobre-producido”, y de repente ese artista se ve endeudado por encima de sus posibilidades y no tiene un capital extra.

En un pequeño negocio, muchos problemas vienen de la rápida expansión, o por querer que la compañía llegue demasiado lejos. Si tu éxito llega por hacer un CD de $2000 en tu casa, vender CDs a $10 y conducir hasta los bolos, no hagas un CD de $20000, vayas a algunos conciertos en avión e intentes vender CDs a $15; esto sería suficiente para romper con tu modelo de negocio.

Integra cada nueva iniciativa como una rama del negocio principal. Mantente a ti y a tu negocio a salvo; recuerda que un músico no puede tocar si sus instrumentos son embargados. Los estudios cinematográficos hacen cada película una empresa aparte y luego la distribuyen. Ayuda a limitar la deuda de los negocios y asegura que si una iniciativa no da beneficio, no arrastrará al resto del negocio. Crece con lógica, expándete cuando haya espacio, y asegúrate de que tu negocio está protegido por seguros. Nunca dejes que tu deuda supere el valor total de tu negocio y todo estará bien. Una compañía como Apple no sale y fabrica un millón de iPhones a menos que sepan que los venderán. A los artistas, especialmente a mis compañeros cineastas, les gusta salir y hacer un film de un millón de dólares, sin saber quién es su mercado y qué distribuidor pagará cuánto por qué mercados (hasta la frase suena complicada, pero es por eso por lo que necesitas una persona de negocios haciendo tu plan de empresa y manteniéndote protegido).

5. Principios simples

Esto nos lleva al siguiente punto: empieza poco a poco. Todo artista desea un éxito inmediato, pero una base de fans necesita tiempo para crecer. Si lo gastas todo en un proyecto, puedes encontrarte atascado con un montón de cajas de producto. La mayor parte de las veces, los artistas necesitan tiempo para crecer, no solo artísticamente y estilísticamente, sino en la faceta empresarial. Nunca te excedas más allá de tus medios financieros y emocionales. He visto a muchos cómicos en particular que se han hecho famosos demasiado rápido y se han dado un batacazo emocional y lo han dejado. Un plan de negocio te ayudará a no sobrepasar tus límites financieros y te ayudará emocionalmente a prepararte para el éxito, ya que verás las cosas como un resultado esperable. Si el nuevo iPhone de Apple se convierte en el teléfono más vendido, entra dentro de lo esperado, y no causa un shock. De la misma manera, si Janet Jackson tuvo un problema con su vestido el día antes de que su nuevo álbum saliera a la venta, no suponía un golpe, estaba previsto que saliera en las noticias y que su nuevo álbum fuera un “breast-seller” (breast=pecho, ¿habéis visto qué juego de palabras?). Un plan te permite saber qué esperar, así de simple.

6. Ponlo todo por escrito

La mayoría de negocios familiares tienen un aire muy personal, y lo mismo ocurre con los artistas. Conocer personalmente a un booker hace que parezca lógico acordar una gira por teléfono. Pero basta un mal bolo para dejar fuera a un montón de músicos indies y cómicos. Una pequeña discrepancia sobre quién paga los desplazamientos puede acabar con un artista. Que todo quede claro al ponerlo por escrito te mantendrá a salvo. Una cita que solía tener sobre mi escritorio me salvó muchas veces: “Un contrato ayuda a preservar la amistad sobre la que se basa una relación”. Mi mujer es una de las mejores abogadas del sector del espectáculo y, desgraciadamente, es algo que le pasa a diario oír hablar de pequeños malentendidos que llevan a una cara demanda. Si no tienes más que esto, recuerda, una demanda puede hundir un pequeño negocio o a un artista, así que ponlo todo por escrito.

Si eres un artista de cualquier tipo, lo más importante que debes poner por escrito es la propiedad intelectual de tu obra. Conozco personalmente a un músico que tocó una canción en directo durante años e incluso vendió su CD con esa canción, y, más aun, consiguió que esa canción saliera en una película, todo para que le robase la canción el mismo productor que hizo el CD, que se la dio a un artista famoso que la llevó a lo más alto de las listas de éxito, sin que mi amigo recibiera ni un penique ni apareciese su nombre en los créditos! Lamentablemente nunca registró el copyright y por tanto no tenía base legal sobre la que sostenerse. Asegúrate de que toda tu obra esté protegida por escrito.

Un último punto: no te limites a ponerlo por escrito, entiende bien QUÉ pones por escrito. TLC vendió más de 10 millones de discos y todavía tenían $200000 de deudas. Ellos fueron increíbles rompiendo récords, barreras y corazones; pero su contrato destrozó su cuenta bancaria.

7. Sé competitivo

Mantente siempre en vanguardia. Los artistas tienen la bendición de que las buenas ideas fluyen, y la mayoría de los negocios matarían por tener un talento así. Muchos artistas indie que conozco se mantienen creativos en su arte, pero no pasa lo mismo en su faceta empresarial. Estate al tanto de las últimas tecnologías para modernizar la producción de tu arte e incluso las operaciones del día a día como la contabilidad. Pequeños detalles pueden hacer una gran diferencia; por ejemplo las tecnologías en la producción de filmes ahora permiten equipos más reducidos que hace 15 años. Ahora puedes usar un servicio externo de contabilidad para pagar facturas y nóminas en lugar de tener un contable a tiempo completo. Puedes vivir en un lugar más barato gracias a los conciertos remotos con plataformas como Stage-it. Una amiga nuestra, Shannon Curtis, está ganando más dinero con conciertos privados en casas que tocando en salas tradicionales en Los Angeles; el negocio se ha transformado, y ella vio con agudeza cómo sacarle partido a la tendencia, con su base de fans y su estilo de música en mente. Su competitividad le reportó ventajas y ahora incluso gana dinero enseñando a otros músicos cómo hacerlo. La frase “no dejes tu trabajo habitual” tiene diferentes sentidos: si tienes algo de éxito, sigue adelante! Dormirse en los laureles de la fama conseguida no es lo que te hizo famoso en su día; mantén ese espíritu competitivo que te llevó a donde estás y sigue trabajando. Las pequeñas empresas que no siguen siendo competitivas en su mercado van a menos.

8. Hazte con el equipo correcto

Mantenerse competitivo significa que necesitarás contratar a gente. Un artista emergente necesita un montón de cosas, incluyendo producción de audio de calidad, vídeoclips, fotos, diseño de álbumes, notas de prensa, y más. Contrata a la gente más cualificada que puedas permitirte, y asegúrate de que están alineados con tu misión. Encontrar otro artista con el que conectes puede dar mejores resultados que contratar sencillamente a un buen técnico. Podría llevar tiempo, pero no cojas a la primera persona que te ofrezca un buen trato. Si no encaja bien, el producto final no responderá a tu misión, y pronto, tu visión artística, que te define, se perderá, y como resultado empezarás a perder fans. Muchos artistas cogen lo que pueden, esta no es la manera de llevar un negocio y te conducirá al fracaso. Un pequeño negocio no hace un anuncio porque un fan se ofrezca a hacerlo gratis. Si te tomas en serio la publicidad y el marketing, asegúrate de que se hace de acuerdo con tu plan de negocio y tu misión. Puedes tener suerte y conseguir un videoclip o un tráiler de tu película gratis de vez en cuando, pero muchos pequeños negocios lo hacen peor por tener malos anuncios y publicidad. Tu arte e imagen deben ser protegidos.

Por otro lado, contrata al manager, agente, contable y abogado adecuados. Asegúrate de que tienen clientes similares y que entienden lo que haces. No contrates a un abogado que gestiona accidentes de coche, sino un abogado del sector del espectáculo que entiende el negocio y los contratos que necesitarás. Un abogado y un contable son dos servicios profesionales que no solo te pueden ahorrar dinero a la larga, sino salvar tu negocio. Pídeles que lean tu plan de negocio y tu declaración de principios y explícales cómo podrían ayudarte a alcanzar tus objetivos. Encuentra al mejor estudiante de cine para hacer un vídeo contigo, o pide a un profesor que se una a ti con su mejor estudiante de cine para la siguiente ronda de proyectos. Esto te llevará a mejores resultados que contratar a la persona más barata en las páginas amarillas.

Sea lo que sea lo que necesites, hazte con lo mejor que puedas conseguir; tomarte tiempo para hacerlo te asegurará el éxito empresarial. Los artistas que están en lo más alto llegaron a donde están haciendo exactamente eso.

9. Las reglas adecuadas para el equipo adecuado

En los negocios, si alguien trabaja en exclusiva para ti a tiempo completo, es tu empleado. Hay en el mundo del arte un montón de trabajos temporales que normalmente son para contratados temporales. Son para gente que hace trabajos específicos por un tiempo limitado. Anda con cuidado. No te conviene tener problemas legales por declarar que tu negocio no tiene empleados cuando tienes a gente trabajando a tiempo completo exclusivamente para ti y a tus órdenes. Ahórrate tiempo, dinero y una posible multa siendo consciente de que si alguien trabaja para ti a tiempo completo y en exclusiva puede ser considerado legalmente tu empleado. Si tienes un contable o un abogado, te pueden guiar en estos temas. Tener un equipo o servicio profesional que gestione correctamente tu negocio a la larga puede ahorrarte dolores de cabeza, y te mantiene centrado en tu labor artística.

Tratar de ahorrar dinero contratando a proveedores por separado pude costarte más a la larga si no lo haces correctamente. Los pequeños negocios tienen que contratar gente y tienen que seguir las reglas; esto no es diferente para los artistas. Veo esto como uno de los mayores obstáculos para el crecimiento del negocio de un artista. Me parece que este es el punto en que el artista se da cuenta de que es una empresa, y se asusta. A medida que tu negocio crece, también lo hace la necesidad de parecerse a un negocio tradicional. Pasar de bolos en solitario, en los que solo te pagan a ti, a un modelo de empresa de verdad, con nóminas, facturas, y cosas de ese estilo, muchas veces asusta al artista solitario. Esto nos lleva de nuevo al tema del plan de negocio y las expectativas sobre cuánto y cómo crecerás, y si tienes el equipo adecuado, ellos harán la transición de indie a gran empresa más fácil. Recuerda, los negocios tiene reglas y leyes, y el equipo adecuado las conocerá.

10. Sé profesional

Podría sonar raro incluso tener que mencionar esto, pero es primordial. Cuando acudes a una empresa, esperas un nivel de profesionalidad. Si sales fuera a comer, esperas que sigan las leyes de Sanidad, que te traten bien, y que te den un precio correcto por lo que ofrecen. Muchos artistas son excéntricos y olvidan ser profesionales. Artistas que tienen un sólido negocio y se llevan bien con otros consiguen más conciertos. Cualquier círculo en el que estés es pequeño, y la gente habla. El boca a boca puede ayudarte o hundirte. Un booker me dijo una vez,

“He oído que siempre vas con la casa a cuestas y eres puntual.”

Yo contesté “Siempre”.

Él dijo, “Te contrataré cuando quieras!”

Pregunté “¿Has visto mi espectáculo?”

“No”, contestó, “pero creo que no entiendes cuál es el trabajo de un booker”.

“¿Cuál es?”, pregunté.

“Contratar artistas que son profesionales, que ayudan a mi negocio, nada más y nada menos.”

Tuvimos una relación laboral magnífica durante años, él incluso dio nombre a una cheesburger a partir de uno de mis personajes cómicos. Si alguna vez visitas el HaHa Cafe en North Hollywood, pide la Cheesburger Uncle Clyde, y probarás el dulce sabor de la profesionalidad.

En resumen, la reputación de un negocio lo hará triunfar o fracasar, así que procura que tu negocio pague las facturas en fecha, sea puntual, y haga lo necesario para mantener una buena reputación. Esto será más duradero que los altos y bajos de la fama, y quizá, si tienes suerte, conseguirás darle nombre a una hamburguesa.


[Artículo escrito por nuestro colaborador Sean Kinney, artista premitado y cineasta. Su compañía 1 Stooge Entertainment ofrece consultoría creativa a compañías y particulares que intentan llevar su marca a un nivel superior.]