¿Estás listo para lanzar tu nuevo proyecto musical? Haz estas 4 cosas ANTES
[Artículo escrito por Dave Kusek]
La manera correcta de planificar la publicación de tu nuevo álbum, sencillo o vídeo.
Es muy posible que estés trabajando ahora mismo en un interesante proyecto musical, ¿verdad? Quizá es algo tan pequeño como una sola canción, o gigante como una gran producción de un videoclip con un equipo de 100 personas arropándote.
No importa lo grande o pequeño que sea tu proyecto, la pregunta es , “¿Cómo vas desde una idea a poner algo tangible en el mercado?”
La primera etapa es siempre la planificación, y de eso vamos a hablar hoy. Ya sé que la planificación puede parecer una lata cuando estás entusiasmado y solo quieres saltar a un nuevo proyecto. Pero si lo haces todo con tiempo encontrarás menos imprevistos y obstáculos en el proceso. ¿Y quién no desea un lanzamiento en el que todo vaya como la seda?
Es importante apuntar que la planificación es solo una etapa de la ejecución de un proyecto musical de éxito.
¿Qué es un “Proyecto”?
Ahora, ¿qué quiero decir cuando digo “proyectos”? Un proyecto puede ser algo obvio como crear y publicar un nuevo álbum. Pero podría ser algo de menor escala, como crear y publicar una canción o un videoclip DIY.
Un proyecto podría ser algo como planificar y ejecutar una gira regional o una campaña de crowdfunding. O quizás tu proyecto es montar un negocio, como una compañía de producción o un estudio de grabación en el que ofreces tus servicios a músicos y bandas.
Teniendo esto en cuenta, un “proyecto” es un conjunto de tareas que tienen un principio y un final definidos.
Así, “promocionar tu música” no es un buen ejemplo de proyecto porque es algo que está siempre en marcha, pero “crear un EPK” o “hacer una web” serían buenos ejemplos de proyecto.
Ok, ahora que sabemos qué podría ser tu proyecto, veamos algunas cosas que debes hacer en la etapa de planificación de tus proyectos para que sean un gran éxito.
1. ¿Cuál es el objetivo global de tu proyecto?
Tenlo claro con antelación. Muchos músicos hacen cosas solo porque ven a muchos otros músicos hacerlas.
Hacen un EPK aunque no le den uso solo porque un experto de la industria les dijo que era importante. O hacen una página de Patreon solo porque ven a otros músicos tener éxito en la plataforma. O abren un canal de Twitch para transmisiones solo porque el streaming parece ser lo último.
Antes de meterte en un gran proyecto pregúntate cómo beneficiará completarlo al global de tu carrera.
Todas las decisiones de ir adelante con los proyectos deberían hacerse en clave interna, no externa. En otras palabras, tomar una decisión en función de cómo te beneficiará, no cómo beneficiará a otros.
Todo el mundo tiene objetivos diferentes en su carrera, así que el camino de todos será algo diferente. Y eso significa que lo que funciona para otro puede que no sea lo mejor para ti. Reservar tiempo para dar un paso atrás siempre te dará mejor perspectiva y te ahorrará mucho tiempo y energía.
2. ¿Cuáles son tus objetivos?
Ahora que vemos la foto grande, hagamos zoom y veamos tus objetivos para ese proyecto. Cuando los definas, es mejor que sean lo más concretos y accesibles posible.
Obviamente quieres publicar un álbum, eso es un objetivo. ¿Pero para cuándo quieres publicarlo? ¿Cuánto quieres que crezca tu lista de mailing como resultado de la promoción? ¿Te gustaría que te dedicasen un artículo o reseña en un blog? ¿Cuántas ventas anticipadas te gustaría tener? ¿Cuánto dinero quieres invertir? ¿Cuánto dinero quieres ganar? ¿Quieres lanzar un nuevo merchandising con el diseño del disco junto al nuevo álbum?
Los objetivos no deben surgir porque sí. Siempre que sea posible, basa tus objetivos en datos del pasado; de esa manera sabrás que estás proponiéndote algo realista y accesible. Mira cuánto dinero ganaste con las ventas de tu último álbum para determinar tu objetivo de ingresos.
3. Haz un plan de acción
Esto consistirá en hacer un esfuerzo por desglosar tus objetivos en tareas más pequeñas con fechas de ejecución.
Creo que es más fácil hacer un plan de acción si empiezas con una fecha final y organizas tu calendario hacia atrás. Por ejemplo si quieres anunciar tu gira en torno a una determinada fecha, ¿con qué antelación debes contactar con las salas? Desde ahí, organiza tus deberes. Deberías tener a mano datos actualizados, algo de información sobre ti y tu música para presentar a salas, la información de contacto de las salas recopilada en un documento, y los borradores de los emails para enviar a las salas.
¿En qué fecha necesitas tener tu inventario de merchandising completo para salir a la carretera? Desde ahí, organiza tus tareas. Quizá necesitas diseñar un nuevo artículo de merchandising, chequear tu stock y reponer algo que se está agotando, necesitas crear carteles e indicadores, necesitas probar el montaje de tu puesto de merchandising, y necesitas organizar la mercancía en cajas.
4. ¿Cuándo está realmente finalizado el proyecto?
Esto puede parecer obvio, pero muchos músicos fijan objetivos vagos para sus proyectos y acaban perdidos o confundidos a medida que se acercan al final. Este es el momento en que deberías empezar a celebrar el trabajo bien hecho. pero en vez de eso empieza un período de barullo para encajar las piezas finales.
Digo esto porque no todos los proyectos tienen un punto final claro. Por ejemplo, si tu objetivo es publicar un álbum, no termina cuando que el disco llega a iTunes. Luego necesitas hacer que tus promociones estén alineadas y que las reseñas de prensa que has conseguido vayan saliendo sin problemas. Será necesaria una importante coordinación de redes sociales y email durante las semanas o meses siguientes. A veces incluso tienes unos cuantos conciertos o una gira para promocionar la publicación del álbum, lo que es casi otro proyecto en sí mismo.
Otro ejemplo, una campaña de crowdfunding no termina cuando se consigue el objetivo. Debes coordinar las actualizaciones a los mecenas y cumplimentar las recompensas antes de tacharlo de tu lista de proyectos.
Espero que tengas ahora mejor comprensión del nivel de detalle asociado a tu fase de planificación de un proyecto musical. Sé que parece mucho, pero créeme, ¡te darás las gracias por tu diligencia!