[Artículo escrito por Greg Majewski]
Cómo definen “sencillo” plataformas como Spotify y Apple Music
Una breve historia del sencillo
Como formato más antiguo para la distribución de música grabada, el sencillo es algo así como el canon de la industria musical. Revisando lo que dijimos en nuestra mirada al EP, el sencillo fue el único formato durante los primeros 50 años de la música grabada, vendido primero en cilindros de cera y frágiles discos de goma laca y finalmente en discos más robustos de vinilo. El sencillo surgió por obligación, ya que la tecnología y las limitaciones de los formatos en que se prensaba la música no permitían más de una canción por cara.
Fue la revolución del rock en los 50s lo que consolidó la posición en la historia del sencillo de 7 pulgadas y 45 rpm (revoluciones por minuto). Tras la introducción del formato por RCA Victor en 1949, la pujante masa demográfica adolescente empezó a quitar de las manos a los vendedores los 45s a un ritmo imparable debido a su portabilidad, elevando a millones de ventas los megahits como “Rock Around the Clock” de Bill Halley and the Comets. Una de las imágenes más imperecederas de los 50 es un grupo de adolescentes apiñados en torno a un tocadiscos portátil RCA, escuchando el último éxito de la era del rock and roll.
Llega el LP
Tras la introducción de formatos de vinilo más largos como el EP de 10 pulgadas y después el LP de 12 pulgadas, el viejo sencillo de 45 rpm siguió siendo el formato favorito de los nuevos artistas que lanzaban sus primeras canciones y de los artistas consagrados que enviaban sus éxitos a las emisoras de radio. The Beatles, Rolling Stones y el resto de las bandas de la llamada “invasión Británica” se presentaron todas al mundo musical con sencillos de 45 rpm.
Incluso cuando la música se pasó a lo digital con los CDs, los artistas indies usaron el 45 para lanzar sus carreras. En 1988 una banda de garage de Seattle llamada Nirvana publicó su sencillo de debut “Love Buzz” (una versión grabada originalmente por la banda holandesa Shocking Blue) en la nueva serie Singles Club del modesto sello local Sub Pop. Solo tres años después su segundo álbum, “Nevermind”, catapultó al trío al superestrellato. Y cuando el MP3 empezó su ascenso a final de los 90, bandas como los White Stripes escogieron el sencillo de 7 pulgadas para publicar sus primeras grabaciones.
El sencillo en la era digital
Pero ahora que la industria musical es casi enteramente digital y la mayoría de los ingresos llegan de fuentes como el streaming y las descargas, ¿en qué consiste un sencillo?, ¿no es el término un vestigio anticuado de una era pasada? ¡No del todo!
En la era digital, el sencillo reclama su estatus de formato dominante. A medida que el consumo de música ha derivado hacia el streaming, las publicaciones se han hecho más y más breves, con algunos artistas tratando los álbumes como algo a posteriori o incluso a evitar. A los artistas ya no se les exige publicar solo uno o dos sencillos antes del gran lanzamiento de un álbum. Billie Eilish publicó más de 15 sencillos antes de su álbum de debut de 2019 “When We Fall Asleep, Where Do We Go?” (Incluso sacó “Party Favor” en vinilo de 7 pulgadas).
¿Por qué están volviendo los artistas a un modelo de lanzamientos de hace 70 años? En un artículo publicado en Rolling Stone en 2019 titulado “Why Your Favorite Artist Is Releasing More Singles Than Ever” (“Por qué tu artista favorito está publicando más sencillos que nunca”), el directivo de Warner Bros Larry Mattera explica que el tiempo de los oyentes es la materia prima más importante en la era del streaming. Cuando los oyentes tienen opciones infinitas y los lapsos de atención siguen acortándose, las publicaciones se acortan para adaptarse. Un flujo regular de 10 o 15 sencillos durante unos años mantiene a un artista en la mente de sus fans de forma más eficaz que un gran lanzamiento de un álbum con la misma cantidad de canciones.
¿Qué es hoy un sencillo?
¿Pero en qué consiste un sencillo en este nuevo mundo de música por demanda? Igual que el EP, “extended play”, el nombre ha provocado equívocos durante años. En los años analógicos un disco sencillo de 7 pulgadas raramente tenía una sola canción. Hay dos caras en el vinilo, así que la canción principal iría en la cara A y la cara B sería una especie de cajón de sastre. A veces sería una versión grabada por la banda que no encontraba espacio en otro lugar, o quizá una versión en directo de uno de sus éxitos anteriores. Hasta hoy, el término “cara B” se refiere a una canción menos importante que el resto de la discografía del artista.
Actualmente los servicios de streaming más importantes, como Apple Music y Spotify, determinan lo que constituye un sencillo. Pero sus designaciones no son tan diferentes entre sí y realmente no difieren mucho de lo que era un sencillo en los 50s.
En Apple Music y iTunes
Las publicaciones que cumplen los requisitos que siguen tendrán automáticamente insertado el término “-Single” en el título del lanzamiento en Apple Music y iTunes Store.
– La publicación tiene de una a tres (1-3) canciones.
– El total de la publicación es de 30 minutos o menos y las canciones individuales tienen una duración de menos de 10 minutos.
En Spotify
Tu música se clasificará en la categoría “Singles and EPs” si:
– La publicación dura menos de 30 minutos.
– La publicación tiene tres (3) canciones o menos.
¿Por qué deberías publicar un sencillo?
Los sencillos están volviendo a ocupar rápidamente su espacio como el formato principal en la música actual. Esto es razón suficiente para animar a los nuevos artistas a publicar una o dos canciones sueltas. ¿Pero qué pasa con los artistas de mayor experiencia? ¿O artistas que han estado un tiempo inactivos? Todos ellos, y los demás artistas, tienen motivos para publicar sencillos.
Y si estás a punto para distribuir un sencillo y buscas estrategias para el lanzamiento, también tenemos algo para ti.