8 cosas importantes que debes saber antes de distribuir tu música

Lo que muchos artistas nuevos no saben sobre distribuir música.

Tengo un vecino que es un compositor inteligente y divertidísimo. Aunque actúa en conciertos locales, tiene una carrera fuera de la música y nunca ha publicado sus propias canciones. Pero quiere hacerlo. Así que una noche nos sentamos en la terraza a hablar de cómo distribuir música.

Sus preguntas me recordaron que para la gente que nunca ha distribuido música antes, es un mundo totalmente nuevo, emocionante o aterrador.

La conversación también me recordó algo más, que cuando se está empezando, es fácil complicar demasiado las cosas sencillas y simplificar demasiado las difíciles.

En otras palabras, los artistas novatos en la distribución de música tienden a preocuparse por las cosas equivocadas. Así que pensé que sería bueno abordar esos puntos comunes de confusión.

Para ser justo con mi amigo, él no andaba desencaminado en todos los puntos que se mencionan a continuación. Sus preguntas solo alimentaron la idea de este artículo, ¡y años de conversaciones con nuevos artistas hicieron el resto!

NOTA: Nada de esto es un consejo legal, ni siquiera vital. Se trata solo de mi punto de vista.

5 cosas que todo nuevo artista debería comprender sobre distribuir música:

  1. Los derechos de autor ya son tuyos

Muchos artistas novatos tienen miedo de que alguien les robe sus canciones. No quieren distribuir sus canciones hasta que no hayan registrado los derechos de autor de su música.

Pero lo cierto es que, si tenemos en cuenta que se publican miles de canciones nuevas cada día, las infracciones de derechos de autor son relativamente raras. Por supuesto, deberías registrar tus derechos de autor, pero no dejes que ese proceso te frene a la hora de distribuir música.

La producción musical moderna y el registro de los derechos de autor se mueven a velocidades muy diferentes. Distribuir tu música es la vía rápida. Registrar los derechos de autor es la vía lenta.

Repito, no estoy diciendo que no debas proteger tu música. Deberías hacerlo, sin ninguna duda. Pero no retrases tus planes de lanzamiento por miedo a que se infrinjan los derechos de autor. Porque si has escrito la letra, has grabado un demo o has completado el tema, ¡ya posees los derechos de autor de tu música!

Registrar tus derechos de autor con la entidad correspondiente en tu país te ofrece importantes ventajas si tienes que llevar a alguien a los tribunales. Aunque el proceso de solicitud es rápido, puedes tomar varios meses para que se apruebe tu registro. No te desanimes por miedo a que alguien te robe tu música. Pon tus canciones en el escaparate.

  1. No pongas las siglas antes que tu trabajo

Siempre hay algún veterano de la industria musical que advierte a los novatos de que tienen que afiliarse a alguna asociación concreta antes de ser un verdadero artista o compositor. Te dicen que no debes dar ningún paso para publicar tu música hasta que estés afiliado a ASCAP, BMI, SESAC, la MLC, la Academia de la Grabación, el sindicato local, la sociedad estatal de compositores, SoundExchange,…

La lista es larga.

Esta lista está asimismo llena de valiosos servicios para los artistas y compositores, ¡así que DEBERÍAS afiliarte a algunas de estas entidades! Pero recordemos que la mayoría de estas organizaciones se ocupan de recaudar derechos por la música que ya está distribuida: las canciones están ahí fuera en el mundo siendo escuchadas, utilizadas, difundidas, reproducidas, emplazadas e interpretadas.

Así pues, el problema no es que el veterano de la industria que quiere ayudarte te esté engañando como novato o llevándote por el mal camino. El problema es que se hace tanto hincapié en estas organizaciones (que probablemente te suenen todas iguales porque la mayoría son solo siglas), que tú, el aspirante a artista, te sientes intimidado. Empiezas a preocuparte por no poder seguir adelante hasta que no conozcas a fondo los distintos aspectos de la industria musical.

Repito, no me malinterpretes: comprender cuáles son tus derechos, cómo se monetizan y qué servicios te ayudan a cobrar por ellos es importante. Pero la razón de ser de estos servicios es hacer el trabajo por ti. No es necesario que conozcas los detalles más sutiles del flujo de regalías mecánicas para afiliarte a una entidad cuya misión es ocuparse de todo eso por ti.

Y al igual que en el caso de los derechos de autor, es FÁCIL hacerse socio de algunas de estas organizaciones. No te preocupes por las siglas. Vuelve a escribir canciones y a distribuir tu música.

  1. Tu distribuidor hace que las cosas sean manejables

Hablando de la distribución musical, la vas a necesitar.

Se trata del proceso necesario para tener tu música disponible en las múltiples plataformas que existen en el mundo. ¿Suena complicado y caro?

No lo es. Resumidamente: subes tu música en un servicio (¡ojalá sea CD Baby!), y nosotros entregamos tus canciones en todo el mundo, a más de 150 plataformas musicales, como Spotify, TikTok, YouTube Music, Apple Music, Amazon Music, Deezer, Pandora y muchas más.

Bueno, deberías reconsiderar lo que he dicho más arriba: sí ES complicado.

Pero no para ti. CD Baby se encarga de todo lo relacionado con el formato de los archivos y de las entregas, cobramos tus derechos de autor y te lo pagamos todo en un sencillo tablero de tu cuenta. En una sola tarifa, también incluimos las licencias de sincronización, la monetización de vídeos sociales y mucho más.

Son oportunidades adicionales para tu música que ofrecemos como parte de nuestro servicio Estándar. Pero, al igual que con todos los demás consejos que he dado, aprenderás sobre la marcha. Como en cualquier otra actividad nueva para ti. Así que no asumas que tienes que convertirte en un experto en cosas como las licencias de sincronización o la identificación de contenido de YouTube antes de lanzar tu música.

  1. Nadie escuchará tu música simplemente porque esté disponible

Una cosa que es un fastidio escuchar, pero que es absolutamente crucial que entiendas por adelantado, es que a nadie le interesara tu nueva música hasta que tú hagas se interesen por ella.

La llegada de una nueva canción no es especial. Quiero decir, por supuesto que es especial para ti; pero algunos informes dicen que se publican 60.000 canciones nuevas cada día. Imagínate. Todo el trabajo y el talento que pusiste en tu nueva música… ¿60 mil otros músicos han hecho lo mismo hoy?

La disponibilidad de tu música, aunque es algo que merece la pena celebrar, no es un indicador de éxito. Tienes que trabajar más, identificar tus ventajas en lo que al marketing de tu música concierne, contar una historia convincente y hacer que la gente se interese. Solo entonces interrumpirán su día para pulsar play y escuchar la música.

ESTA debe ser la principal preocupación de los artistas cuando lanzan nuevas canciones: atraer a los oyentes y ganar impulso.

Y aunque siempre tenemos grandes esperanzas puestas en nuestra música nueva, nunca nos pondremos a trabajar en la dura tarea de CONSTRUIR una audiencia si nos aferramos a la ingenua suposición de que la gente se dará cuenta y se interesará por ella automáticamente.

  1. Tú eres un sello discográfico

Esta es otra forma de afirmar lo que he dicho anteriormente, pero TÚ eres el responsable del rendimiento de tu música en el mercado. Y sí, es un mercado. Con una oferta de música que aumenta rápidamente para satisfacer una cantidad de atención del público cada vez más limitada, no es una tarea fácil.

El trabajo de una discográfica es financiar, guiar y ayudar al artista. Si no tienes una discográfica, tú eres tu PROPIO sello. Y una discográfica es un negocio, con un presupuesto, una red de contactos y una estrategia. Como artista, tú aportas la chispa, la voz, la historia. Como sello discográfico, tú aportas el plan, el esfuerzo y quizá incluso la inversión monetaria.

Para tener éxito, tendrás que llevar ambos trajes (propietario del sello y artista) o crear un equipo de expertos de confianza en torno a tu música. Ambos enfoques tienen sus pros y sus contras, pero recuerda: tú eres la discográfica. Eres el director general de tu carrera musical. Tú estás al mando. Nadie va a entrar en escena para convertirte en una estrella hasta que hayas demostrado que eres un artista (y un negocio) que merece su tiempo, su atención y su capital.

No esperes a que te bendigan los reyes, los creadores de tendencias, las grandes marcas, los blogs de moda o las playlists del momento. Empieza hoy mismo a encontrar tu propio camino hacia el éxito. Una vez que lo hagas, todos esos actores poderosos estarán de repente a la vuelta de la esquina.

  1. Perseguir las métricas de vanidad puede perjudicarte

Creemos que los números -especialmente los asociados a nuestra presencia online (reproducciones, visualizaciones, seguidores, etc.)- son muy importantes. Le dicen al mundo que somos geniales o unos perdedores.

¿No es así?

No es así. Existen las reproducciones falsas, las visualizaciones inútiles, etc. Un número por sí mismo es ya una «métrica de vanidad».

Las métricas de vanidad no dicen nada sobre la profundidad de la conexión de tu audiencia con tu contenido y canciones. Solo expresan que alguien ha consumido una parte de lo que has puesto ahí afuera.

Cuando estás empezando, es crucial encontrar a tus VERDADEROS fans, para que con el tiempo puedas enseñar a las distintas plataformas cómo hacer llegar tus canciones y vídeos a más personas que compartan esos intereses.

Perseguir métricas de vanidad puede llevar a los nuevos artistas a contratar servicios sin escrúpulos para inflar sus reproducciones y visualizaciones. Pero no son verdaderos fans. En algunos casos, ni siquiera son humanos reales.

¿Oyentes indiferentes y granjas de bots? Malo.

¿Una pequeña audiencia que ama todo lo que creas y quiere escuchar tus canciones una y otra vez? ¡Fantástico! Esa es la base que quieres construir.

Calidad sobre cantidad. O mejor dicho, primero el compromiso con la calidad; luego eso puede llevar también a la cantidad.

  1. No puedes construir un equipo hasta que hayas construido tu propia carrera

Si unos desconocidos te escriben al principio para ofrecerte servicios, éxito o fama, probablemente sean estafadores.

Los agentes de contratación, los publicistas, las discográficas y los promotores más reputados…. no llaman a los artistas de buenas a primeras.

La mayoría de las veces, tendrás que encontrarlos. Acércate a ellos. Preséntales tu música y tu historia. Y solo dirán que sí, si ya has construido por tu cuenta algo que les impresione.

Así que no te dejes engañar por la gente que te promete el cielo. Nuestros sueños y nuestro anhelo de sentirnos validados… son como carnada en el agua para los tiburones.

  1. El éxito será diferente de lo que imaginabas

El mundo cambia rápidamente. Puede que te enamoraras de la música e imaginaras el éxito hace un año o tal vez décadas. En cualquier caso, lo que es posible HOY es diferente de lo que era posible mañana.

Algunos de los cambios son estupendos, otros presentan nuevos retos. Pero la cuestión es que, si pensabas que ibas a tocar en estadios, quizá ahora te veas hablando con tus miles de seguidores en TikTok.

Tal vez pensabas que ibas a ser el cantante de una banda, y en lugar de ello quizás ahora eres un gran co-compositor y productor.

Tal vez pensabas que harías giras en el circuito de conciertos locales, pero las circunstancias te han llevado a hacer livestreams diarios en Twitch.

Sé flexible. El hecho de que no alcances el objetivo que pretendías inicialmente no significa que no vayas a tener éxito.

BONO: ¿Es suficiente con subir tu música a Soundcloud o Bandcamp?

Soundcloud y Bandcamp son plataformas increíbles, muy útiles, cuyos usuarios les dedican mucho tiempo y atención.

Así que deberías aprovecharlas al máximo.

PERO… Siempre me sorprende la cantidad de artistas nuevos que piensan que es suficiente con aparcar su nueva canción SOLO en esas plataformas.

Mientras tanto, el 99% de la audiencia potencial del artista está en otros lugares, porque recuerda que el consumidor medio de música utiliza Spotify, Apple Music, Amazon Music, TikTok, YouTube Music, Pandora, Deezer, etc.

Así que tienes que estar en todas partes. Como decíamos en el punto número tres, hacer que tu música esté disponible en todas partes no es difícil.


La cosa más importante que debes recordar sobre distribuir música

Los derechos de autor, los derechos editoriales, la distribución… estas cosas pueden resultar confusas e intimidantes al principio.

Pero recuerda que solo es una infraestructura. Es el cableado eléctrico de la industria musical. ¡No es la MAGIA!

Todo lo verdaderamente especial de la música gira en torno al artista y el oyente. Todos estos servicios, las siglas, tu distribuidor, pueden ayudar a tender un puente entre tú y tu público, pero depende de ti hacer la conexión.

Así que no esperes. Zambúllete. Aprenderás sobre la marcha.

Y recuerda esto desde el principio y con frecuencia: siempre deberías poner el MAYOR énfasis en hacer buena música, diseñar portadas atractivas y contar una buena historia acerca de tus canciones.